4 de juny 2025

huesos en el jardín, 3

 


HUESOS EN EL JARDÍN de Henning Mankell

por Mari
en La isla de las mil palabras
08/04/2015

    "De Mankell, con su Kurt Wallander lo he leído casi todo, y leer esta novela, que casi no es tal, ha sido como cuando llegas a casa y te pones esa ropa que ya se adapta a ti, y que te moldea a la perfección. Volver a mi querida novela nórdica con esta obra tan intimista, ha sido una sensación muy agradable.

    Ante todo, hay que aclarar que no se trata de novela normal de Wallander, con toda su complejidad, se trata de una novela de transición, en la que nos da una pauta cronológica de unos años en lo que había una cierta laguna temporal. Además fue escrita anteriormente a El hombre inquieto, y se vendió únicamente en Holanda, siendo ahora cuando ha sido traducida.

    La acción transcurre cuando un Kurt Wallander gruñón y cansado que vive con su hija Lisa, con la que no llega a llevarse del todo bien, ve la oportunidad de hacerse con la casa con la que lleva tanto tiempo soñando.

    Su compañero Martinsson le ofrece las llaves de una vieja casa, de cuya venta se encarga su mujer. Un domingo Kurt coge las llaves y se dirige a echarle un vistazo, encontrando que es todo aquello que él se había imaginado, una finca relativamente grande, con un jardín casi salvaje, típica de la zona de Escania, y cerca de donde vivía su padre.

    El dueño un anciano Karl Eriksson que vive ya en una residencia, tiene casi noventa años ya no la quiere porque no la puede mantener, y Wallander se ve absolutamente hipnotizado por la casa y ya se imagina incluso las reformas que le va a hacer.

    En el jardín tropieza con algo que no le cuadra, y cuando se pone a mirar, encuentra que lo que pensó que era un rastrillo enterrado, no es otra cosa que una mano de un esqueleto que lleva allí casi 50 años, según los forenses.

    La policía al excavar en el jardín, se encuentra con que hay otro cadáver más. Wallander por supuesto, va a intentar averiguar quienes son los habitantes del jardín de la que ya consideraba su casa. Con la ayuda de sus siempre fieles compañeros Martinsson y Lindman, conseguirá resolver el enigma, a pesar de que tendrá que remontarse muchos años atrás, cuando las cosas eran muy diferentes.

    Mankell en pocas páginas y con agilidad nos da un caso resuelto, en el que el ambiente y el propio Wallander es lo más destacado. Porque Kurt está mayor, se siente solo, fuera de lugar, algo enfermo, huraño, arisco, vamos como cualquiera de nosotros un día de tantos. Lo que hace que empatices rápidamente con el personaje.

    Y el final, o posfacio, es una de las cosas más importantes del libro, porque en unas quince páginas el autor se va a abrir y nos va a contar sus motivaciones, sentimientos y objetivos cuando comenzó a escribir los libros de Wallander. Y un poco va a despedirse, y nos va a razonar porqué.

    Evidentemente no es un gran libro, pero es como he dicho antes, una novela que te deja buen sabor de boca por su ambientación, su fluidez, su tranquilidad y el reconocimiento de sus personajes.

    Si no has leído a Mankell antes, puede ser una buena forma de empezar por el final, porque es sencillo. Si lo has leído, no encontrarás un pata negra, pero sí una bata de franela."





Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada