19 de març 2024

trobada vespres literaris 2024, u

 


    Aquest divendres, quinze de març, va tenir lloc la XIX trobada anual del grup, reunió que vam aprofitar per gaudir plegats d'un cap de setmana de complicitats i bons moments.


    Per segon any consecutiu hem gaudit de l'hospitalitat de La Devesa i la seva amfitriona, la Carmina.


    Un cop allotjats i agafat forces després del viatge, comencem les activitats del cap de setmana amb una proposta del grup de cinema de fer una xerrada debat al voltant d'una pel•licula que vam veure prèviament  cadascú a casa seva.

    La pel·lícula proposada, va ser “La boda de Rosa”, pel·lícula de l'any 2020, va ser dirigida per Icíar Bollaín, responsable també del guió juntament amb la Alicia Luna. Amb música de la Vanessa Garde, la fotografia del Sergi Gallardo i la Beatriz Sastre i el muntatge del Nacho Ruiz Capillas.



    Protagonitzada per Candela Peña, en el paper de Rosa, la van acompanyar Sergi López al paper d'Armando, Nathalie Poza com a Violeta, Ramón Barea com a Antonio, Eric Francés va ser Manuel i Paula Usero, Lidia.



    La pel·lícula començà amb una Rosa, a punt de fer quaranta-cinc anys, que s'adona que ha viscut sempre per i per als altres i decideix reinventar-se, enviar-ho tot a passeig i agafar les regnes de la seva vida. Però abans vol embarcar-se en un compromís molt especial: un matrimoni amb si mateixa.

    Aviat descobrirà que el seu pare, els seus germans i la seva filla tenen altres plans, i que canviar de vida no és tan senzill al si de la seva família. Casar-se, encara que sigui amb ella mateixa, serà el més difícil que hagi fet mai.

Icíar Bollaín apunta:

    "Conciliar lo que Rosa quiere con lo que quieren los demás se convierte en una tarea titánica, incluso aunque se trate de organizar su propia boda.

    Hay muchas Rosas entre nosotros y todos somos un poco Rosa... Aprender a saber lo que uno quiere y no renunciar a ello es una asignatura difícil de aprobar y a veces no se consigue en toda la vida. Pero Rosa está dispuesta a conseguirlo.

    Creo que LA BODA DE ROSA se parece a mis primeras películas. Es una historia de personajes, de sus relaciones entre ellos y con el mundo y que intenta hablar de cosas que de una forma u otra nos afectan a todos, pero siempre con humor y emoción."

El debat va ser molt viu i amb intervencions que van destacar l'aspecte més humà del tema que ens proposaba la directora.



18 de març 2024

dia mundial de la poesia

 


    Enguany, per celebrar el Dia Mundial de la Poesia (21 de març), la Institució de les Lletres Catalanes ha escollit el poema “m'he estimat molt la vida” de Vicent Andrés Estellés, de qui aquest any es commemora el centenari del seu naixement.


XLII



m’he estimat molt la vida,
no com a plenitud, cosa total,
sinó, posem per cas, com m’agrada la taula,
ara un pessic d’aquesta salsa,
oh, i aquest ravenet, aquell all tendre,
què dieu d'aquest lluç,
és sorprenent el fet d'una cirera.

m’agrada així la vida,
aquest got d’aigua,
una jove que passa pel carrer
aquest verd
                 aquest pètal
                                   allò

una parella que s'agafa les mans i es mira als ulls,

i tot amb el seu nom petit sempre en minúscula,

com aquest passarell,
                                 aquell melic,

com la primera dent d’un infant.


Vicent Andrés Estellés
Obra Completa IV 
[Horacianes], 2017

17 de març 2024

maddalena cerasuolo( lenuccia)

 




Nápoles, 2 de febrero de 1920 - Nápoles, 23 de octubre de 1999; partisana



    Nápoles fue la primera ciudad italiana que se liberó de la ocupación nazi-fascista, incluso antes de la llegada de las tropas estadounidenses. El levantamiento popular contra el ejército alemán, que tuvo lugar del 27 al 30 de septiembre de 1943, se conoce como los "Cuatro Días de Nápoles". Maddalena Cerasuolo (Lenuccia, como la llamaban familiarmente) fue una de las muchas mujeres protagonistas de esta insurrección.

    Nació en Nápoles el 2 de febrero de 1920, en el barrio de Stella, en el seno de una familia numerosa. Su padre Carlo, cocinero y militante antifascista, dirigió el comedor Ansaldo durante la Segunda Guerra Mundial y cuando le quitaron el trabajo acabó vendiendo pizzas fritas en la calle. Maddalena trabajaba como en una fábrica de zapatos.

    Durante los enfrentamientos armados en el distrito de Materdei, Lenuccia, para evitar que los alemanes saquearan una fábrica, se ofreció a ir sola para evaluar el tamaño de las fuerzas alemanas, poniendo en riesgo su propia vida. Posteriormente también participó valientemente en el enfrentamiento en defensa del Puente Sanità, junto a su padre, con los partidarios de los barrios de Materdei y Stella, para defenderlo de los alemanes que querían derribarlo.

    Maddalena Cerasuolo fue una auténtica heroína y, por su contribución a los "Cuatro Días de Nápoles", el 24 de mayo de 1946 recibió la Medalla de Bronce al Valor Militar: "Después de haber actuado como portavoz de los partisanos con los alemanes en Vico delle Trone, se distinguió mucho en los combates que siguieron. El mismo día participó valientemente también en el enfrentamiento en defensa del puente Sanità, junto a su padre, con los partisanos de los barrios de Materdei y Stella".

    Una vez terminada la guerra volvió a su vida habitual, se casó y tuvo dos hijos. Murió en Nápoles el 23 de octubre de 1999, convirtiéndose en una de las testigos más famosas de la Resistencia napolitana y en el símbolo de las mujeres de la Resistencia del Sur.

    El 27 de enero de 2011, el Ayuntamiento de Nápoles, en su honor,  puso su nombre al puente sobre el distrito de Sanità.  El Puente representa un lugar simbólico para la ciudad y es uno de los pocos puentes que llevan el nombre de una mujer.

16 de març 2024

altres lectures

 

Retrato expresionista del Nápoles de posguerra

por Francisco Martínez Bouzas
en “Brújulas y Espirales”


Un coro de almas

Wanda Marasco


traducido por Carlos Gumper

Tusquetes Editores, 2018

páginas: 253

    "Existe sin duda alguna una tradición consolidada de escritoras napolitanas (Anna María Ortese, Antonella Cilento, Valeria Parella, Maria Orsini. Elena Ferrante…) a las que es preciso añadir Wanda Marasco (1953), cuya novela La compañía delle anime finte (Un coro de almas) en la traducción española fue finalista del Premio Strega 2017. Una novela tan magnífica como dura y desgarradora.

    El libro se abre con una dedicatoria a la poesía a golpe de realidades, una verdadera advertencia al lector porque muy pronto va a descubrir la saga familiar de Vicenzina Umbriello a través de la mirada y las palabras, no siempre benévolas, de sus hija Rosa Maiorona. En efecto, desde la colina de Capodimonte, Rosa mira Nápoles y le habla al cuerpo de Vicenzina, su madre recién fallecida. Le habla de reparar el daño que las ha unido más allá de la unión de la sangre, y ha marcado irremediablemente la vida de ambas. Sumergiéndose “en las vísceras de un purgatorio público y privado”, Rosa revive la historia de su madre, su infancia pobre en una tierra desolada a las puertas de la ciudad, el encuentro tras la destrucción y la miseria de los años posteriores a la Guerra con Rafele, de estirpe noble decadente, que será su futuro padre.

    El resultado es una novela coral de voces femeninas. Rosa, hablándole al cuerpo frío de la madre reconstruye la historia. Y sobre la madre, sobre Vicenzina se vertebra y sustenta una trama tremenda de lucha y de supervivencia en el Nápoles de posguerra. Rosa asiste a los últimos instantes de la existencia materna, ve la carne agonizante, las huellas del pasado: el pasado de su madre y el suyo propio. Y escribe como reparación de una criatura a otra. Vicenzina se casa con Rafele Maiorana y con esa unió marital quedan definitivamente trazadas las improntas de su vida.

    Surge así una novela sobre Nápoles sobre sus gentes, sobre sus calles. Y sobre todo el relato de la descomunal lucha por la supervivencia en una ciudad que acaba de salir de la Guerra y en la que la ferocidad es la única forma de perdurar. Un Nápoles todavía al margen de la Camorra pero no de la miseria y de la usura. Este Nápoles de la posguerra es la hermandad entre un ejército extranjero, el nuevo gobierno y el hampa.

    Formando parte sustancial de la trama los amores entre Vicenzina y Rafele, que por amor a ella, pobre y sin cultura, afronta la oposición de la madre, Lisa Campani. Pero la boda proscrita se celebra sin que de la casa de los Maiorana acuda nadie. Pronto vienen los hijos y Vicenzina inyecta en cada uno de ellos el fantasma de un mundo pobre y una visión de la existencia bastante alejada de la moral. Ella misma, con la ayuda de Rosa que en un cuaderno lleva las cuentas, practicará el préstamo con usura.

    Rafele no había seguido las carreras burguesas del padre médico y de los hermanos, quedándose en simple oficinista, condenado a una muerte precoz. Sus hijos habían crecido gracias a los esfuerzos de Vicenzina que recurre a la usura para pagar el costoso tratamiento médico del marido.

    Rosa recuerda a su profesor, a los compañeros y compañeras de infancia, su propia juventud recorriendo las calles pobres de Nápoles, la muerte del padre la vida de prestamista usurera de la madre. Inmortaliza a la madre al mismo tiempo cercana y alejada; fuerte, decidida, dispuesta siempre a enfrentarse con la adversidad.

    Además de las dos grandes protagonistas, Vicenzina y Rosa, por la novela circula una gran nómina de secundarios, Ese es el coro de almas, sin el que la historia de Wanda Marasco no se sostendría. Son ellos los que enriquecen la trama con sus dolores y pequeños disfrutes, con las tragedias que azotan a la familia y al vecindario. La misma protagonista y relatora no sabe si la suya es la verdadera historia de Vicenzina, pero a lo largo de su vida aprendió a construir una que se le semeja.

    En la novela aflora todo el Nápoles violento: el de las furcias, los prestamistas, las comadres, las ogras, miserias, dramas antiguos y actuales. El Nápoles de las mujeres pobres, de carne humillada, de turbulencias carnales, la ciudad de la usura. El Nápoles donde se manipula la vida del pobre al lado del pobre. El Nápoles de la espiral de semisótanos, del estupro y de la peste del callejón sin fin.

    La autora traza con mano sin ningún temblor el retrato expresionista del Nápoles de la posguerra en una novela escrita con una lenguaje en el que también las formas dialectales napolitanas imponen su impronta literaria."

15 de març 2024

le quatro giornate

 




Las cuatro jornadas de Nápoles
por Xavier Tornafoch
Crónicas ausetanas
en "El Cuaderno"
julio 2022



    "Entre el 27 y el 30 de septiembre de 1943, en plena descomposición del régimen fascista italiano, mientras las tropas aliadas se acercan a Nápoles, a la que llegaran el primero de octubre, después de que el ocho de septiembre el mariscal Badoglio hubiera firmado el armisticio de Cassibile, los nazis ocupan esta ciudad. Inmediatamente, el comandante provisional y gobernador alemán Walter Schöll se hace cargo de la situación. La capital de la Campania se encontraba en ese momento repleta de soldados italianos en desbandada, destruida por los bombardeos aliados que habían causado 25.000 víctimas y numerosos destrozos materiales, y soliviantada por la presencia de los alemanes, que ocuparon la ciudad ante una mínima resistencia de grupos de militares desertores y de una compañía de Carabinieri. Con la ocupación, empezaron los actos de represalia para castigar la resistencia que se había producido. Muchos de los mandos alemanes y buena parte de las tropas encargadas de esas tareas represivas eran antiguos combatientes del frente del este, donde habían participado en numerosas atrocidades contra la población civil. En esa lógica, se inició el reclutamiento forzoso de los hombres para trasladarlos a Alemania y obligarlos a trabajar en la industria de guerra. Mientras tanto, se sucedían los juicios sumarísimos y los fusilamientos. Las arbitrariedades de las que fue objeto la ciudadanía napolitana motivó una de las insurrecciones populares, junto a la de Varsovia, más violentas de la segunda guerra mundial. El primer barrio que se sublevó fue el de Vomero; después siguieron el resto de quartieri napolitanos. Las represalias alemanas fueron contestadas con la furia de la población local que se abalanzó contra los ocupantes. Los napolitanos acapararon todo tipo de armas para utilizarlas contra el enemigo y, cuando no disponían de ellas, se las ingeniaron para responder el fuego alemán lanzando agua hirviendo desde las ventanas de las casas situadas en callejuelas angostas por las que los soldados nazis deambulaban en busca de insurrectos, en una lucha que por momentos tuvo reminiscencias medievales. Ante la imposibilidad de contener la insurrección, y viendo que las tropas aliadas se acercaban a Nápoles, el comandante alemán negoció con el capitán Vincenzo Stirolo la liberación de los prisioneros a cambio de abandonar la ciudad. Los alemanes marcharon de la ciudad por la Via Roma, mostrando banderas blancas en lo alto de sus vehículos blindados. Al finalizar la batalla, los insurrectos tenían 330 bajas (168 muertos y 162 heridos), de las cuales 159 eran civiles. Los alemanes tuvieron 96 fallecidos.

    La capital de la Campania fue la primera ciudad europea liberada del yugo nazi por sus propios habitantes, que se organizaron espontáneamente en comités de barrio, sin jefes ni mandos. La lucha guerrillera napolitana, compuesta por mujeres, hombres y niños, la gran mayoría de ellos sin ninguna experiencia militar, fue el embrión, y el modelo, de la resistencia partisana en el resto de Italia. Tuvo sus héroes, el más reconocido de ellos el pequeño Gennarino Capuozzo, un niño de once años que murió en los combates. A día de hoy, numerosas escuelas, bibliotecas e institutos italianos llevan el nombre del valiente Gennarino. Existe una película del año 1962, dirigida por Nanni Loy (Cagliari, 1925-Fiumicino, 1995), que recrea esta rebelión popular: Le Quattro Giornate di Napoli. El elenco de actores está formado por algunos de los clásicos intérpretes de la Italia de postguerra, como el magnífico Gian Maria Volonté o la espléndida Regina Bianchi. El filme fue filmado en blanco y negro en las calles de Nápoles y en algunos de los escenarios históricos donde tuvieron lugar los acontecimientos, como el estadio de Vomero, lugar elegido por los nazis para retener a los insurrectos presos, o el Palazzo dell’Università degli Studi Federico II, ante la fachada del cual se fusiló a un grupo de estudiantes rebeldes. Cuando se habla de memoria democrática, lo mismo en Italia que en España, se debería pensar en sucesos como los de Nápoles, en los que un pueblo martirizado por la tiranía, en el caso napolitano por la doble tiranía nazi y fascista, decide liberarse. Recordar este pasado continúa siendo necesario."



14 de març 2024

viola ardone, obra i 5

 

Grande meraviglia

Viola Ardone

Einaudi, 2023

304 pàgines

llengua: italià



SINOPSI:

    "El amor es incomprensible, una forma de locura."


    En la franqueza de la mirada de Elba, el asilo se convierte en un lugar divertido y terrible, como la vida, que Viola Ardone sabe narrar en su ferocidad y belleza.

Tras el El tren de los niños y La decisión, Grande Meraviglia completa una trilogía ideal del siglo XX. En esta novela sobre la mayoría de edad, el vínculo de una niña con el hombre que decide liberarla revela la necesidad muy humana de ser reconocida por los demás, de sentir que existe.

    Elba tiene el nombre de un río del Norte: fue su madre quien lo eligió. Solían vivir juntos, en un lugar que ella llama medio mundo y que en realidad es un hospital psiquiátrico. Luego su madre desapareció y ella no tuvo más remedio que crecer, redactando su Diario de enfermedades mentales y contándoles a los recién llegados a la sala sobre los doctores Colavolpe y Lampadina, la enfermera Gillette y la perra Nana. De su universo, en definitiva, el único que conoce. Al menos hasta que a un joven psiquiatra, Fausto Meraviglia, se le mete en la cabeza sacarla del hospital psiquiátrico, o más bien eliminar los manicomios; al fin y al cabo, esto es lo que establece la ley Basaglia, aprobada unos años antes. El doctor Meraviglia lleva a Elba a vivir a su casa, como a una hija: la única que ha elegido, y gracias a la cual él, que nunca ha sido un buen padre, aprende el peso y la fuerza de la paternidad. Con su escritura intensa, original y llena de música, Viola Ardone nos dice que el amor de los demás nunca depende sólo de nosotros. Éste es su misterio, pero también su maravilla.

13 de març 2024

viola ardone, obra 4




Cinc raons per llegir 'La decisión' de Viola Ardone

La novel·la sobre la revolució silenciosa de les dones a la Sicília dels anys 70

per Aida Doz Esteban
Diari de Barcelona
18/05/2023



   " La decisión (Seix Barral) és una novel·la escrita per Viola Ardone, inspirada en un cas real, que dona visibilitat a l'opressió que vivien les dones a la Sicilia dels anys 70. Enmig de la transició en què es troba el país, se’ns presenta a l'Oliva Denaro, una jove adolescent que es veu sotmesa a tenir una vida diferent de la qual ella voldria. La pobresa, la família, la tradició i les males llengües la porten a escollir si seguir amb el camí que li ha estat imposat o començar-ne un de nou.
La força de les primeres paraules

    “La dona és com un càntir: qui el trenca se’l queda, això diu la meva mare”, llegeixo. Les primeres paraules de l'Oliva s’introdueixen amb força. Em quedo pensativa. Continuo. “A mi m’hauria agradat més néixer home com Cosimino, però quan em van concebre ningú va demanar la meva opinió”, remata. Aquesta frase és la primera que et trobes en obrir les pàgines blanques de La decisión. De 392 pàgines que completen l’obra, n’he tingut prou amb la primera per saber que aquest era el llibre que volia —i havia— de recomanar aquesta setmana. Encara arriscant-me a fer algun que altre —petit— spoiler, aviso amb antelació que aquesta no és l’única cita que mencionaré, però sí la introductòria. Una història potent no sempre necessita ser maquillada (ja ho diuen, de vegades menys és més). Aquesta història, però, es construeix de personatges ferms, de relats que t’acompanyen fins a casa i de paraules que se’t claven a les entranyes fent-te sagnar i fent-te sanar.

Mort a les males llengües

    “La vida a Martorana està feta de mirades —vaig pensar—: mirar i que et mirin. I quan algú s’exposa, sempre pretén mostrar-se millor del que és”, diu l'Oliva. No sabria dir si aquesta exposició, que tantes mirades i xiuxiuejos genera, és producte directe de l’època que es tracta o és simplement perquè és un poble; i bé, aquells qui som de poble ja sabem el que això implica (i d’aquí venen els meus dubtes). Tanmateix, la protagonista creix sota un cúmul de rumors i expectatives que la fan ser qui és; actua en funció del què diran i, sobretot, no actua pel mateix motiu. “Fugia de les xafarderies, de la vergonya, de la meva mare (...). Havia deixat de ser invisible: podien espiar-me i jutjar-me”. S’exposa, pretén i fuig, però alguna cosa s'encén dins seu quan finalment es cansa de les males llengües i decideix enfrontar-se a les que, per activa i per passiva, no permeten que la seva tingui vida pròpia. Les veus que l’envolten són les mateixes que la condicionen, i ella calla, fins que deixa de fer-ho. És llavors que un fil de veu que prové del seu estómac li surt per la boca per demostrar que les llengües només són males si silencien la teva.

La contradictòria curiositat de la protagonista

    L'Oliva és una persona curiosa (la seva mare diria que ho és massa). S’interessa per aprendre, per saber, per entendre. Ella, que no entén moltes de les coses que passen diàriament al seu voltant, es troba enmig de dues posicions completament allunyades l’una de l’altra. Hi ha moments en què genuïnament s’esforça per saber què és el que la diferencia de la resta, socialment parlant, com passa quan admet que “ignorava que existís la paraula diputada. Al diccionari de la mestra Rosaria, el femení d’algunes paraules com ministre, alcalde, jutge, notari o metge, ni tan sols apareixia.” En altres ocasions, però, es contradiu quan afirma que “una dona que dona guerra no és decent —li vaig contestar, perquè m’ho havia dit la meva mare”. S’observa la lluita interna en la qual es troba quan es prohibeix a si mateixa enfrontar-se al que li ha imposat la societat, recordant-se les paraules que persones del seu voltant li han repetit al llarg de la seva vida, per evitar desviar-se del camí. Això canvia quan entén que de camins n’hi ha molts, però que el camí que ha de seguir és només seu.

El primer cop que et fas gran

    L'Oliva no està a favor de fer-se gran. El primer cop que se’n va anar a fer-se els forats de les orelles, va tornar amb un lòbul palpitant i una ferida, però sense forats ni arracades. El primer cop que li baixa la regla és, també, el primer cop que la seva mare li diu que és guapa (ja veieu que la seva mare en diu moltes, de coses). “De sobte vaig deixar d’adonar-me dels meus defectes: si a ulls de la meva mare era guapa, ho seria de veritat. Si la meva mare em veia, el món sencer em veia. Havia travessat el llindar de la invisibilitat. Era una dona, com ella.” Dir-se això és fruit d’haver-se passat la vida sent menyspreada per una dona que, en realitat, no és com ella. L'Oliva voldria ajudar al seu pare al camp, buscar caragols i caçar granotes, i seguir posant noms de colors a les seves gallines mentre pinta d’un groc intens la seva caseta. Però també, per sobre de tot això, vol ser vista i vol ser real. Ara bé, si això és el que suposa créixer, voldrà seguir sent-ho?

L’inici d’una revolució silenciosa

    L’arribada de la regla suposava un abans i un després en les nenes, que passaven automàticament a ser dones en el moment que la seva faldilla blanca i pura es tacava del fosc vermell del dimoni. D’un dia a l’altre, tot seguia igual, però res era el mateix. L'Oliva no podia anar sola pel carrer, parlar amb homes —encara que un d’aquest fos el seu amic Saro de tota la vida—, ni tampoc córrer per arribar enlloc. “Ara et toca a tu mantenir-te neta”, se li diu. Tot això ho llegim avui dia i sembla ficció, però la realitat és que no sempre ho ha estat, i hi ha molts llocs on encara no ho és. Precisament això és el que reivindica l’autora, qui s’ha inspirat en la història real de Franca Viola, la dona que l’any 1966 va tenir el valor de negar-se al “matrimoni reparatori” al que s’havia d’enfrontar perquè el seu agressor no fos castigat. Una eina que s’utilitzava sovint quan es considerava que les dones assetjades havien “perdut” la seva virginitat i no podien ser deshonorades pel seu responsable. Llegir i escriure això és esgarrifós, però saber que algú ho ha viscut, és desolador. Viola Ardone busca la forma d’exposar la revolució silenciosa que va sorgir d’una realitat compartida per tantes dones que, més que viure, van sobreviure."