7 de juny 2014

el disbarat de la guerra, 4

Esto si que es leer
Francisco de Goya
1797-1799
"Caprichos", estampa 29
Estampa 29
Explicaciones manuscritas de Francisco de Goya

“P: Le peinan, le calzan, duerme, y estudia. Nadie dirá que desaprovecha el tiempo.

BN: Los Ministros, Consejeros y otros tales aguardan para leer; estudiar y enterarse de los negocios a la hora que el peluquero les va a trabajar la cabeza, les despeluza (ver nota del autor)  y ciega de polvo, y el zapatero le prueba los zapatos.

A: Los Ministros aguardan a última hora para enterarse de los negocios. A éste le peinan, calzan y duerme, ¿quién desaprovecha el tiempo?

CN: Ministros y consejeros vemos, que aguardan a estudiar y enterarse de los negocios de su cargo, a la hora de peinarse, y de ponerse los Zapatos.

Nota del autor: Despeluzar: “Descomponer o enmarañar el cabello” (Academia Española, Diccionario de la lengua castellana, Madrid, 1791) y también “erizar los cabellos algún pavor o miedo repentino” (Academia Española, Diccionario de Autoridades, Madrid, 1726-1739).”

Un texto de Tomás de Iriarte perteneciente a su soneto "Tres potencias bien empleadas en un caballerito de estos tiempos" , describe la vida ociosa de la nobleza e ilustra certeramente el sentido de la pieza de Goya.

"levántome a las mil, como quien soy.
Me lavo. Que me vengan a afeitar.
Traigan el chocolate, y a peinar.
Un libro...ya leí. Basta por hoy"


 “En la España del siglo XVIII no hubo modificaciones sustanciales en lo que se refiere al ordenamiento jurídico que encuadraba, en la sociedad estamental, el orden de los tres estados. Los privilegios que ostentaban los grupos dominantes no fueron recortados por la legislación ilustrada, aunque algunas de las medidas legales adoptadas y, sobre todo, el pensamiento de algunos ilustrados, fueron síntoma de cambios operados en la economía que produjeron frutos más tarde y que condujeron a la transformación de la sociedad estamental a lo largo del siglo XIX. Durante el siglo XVIII los grupos privilegiados mantuvieron el dominio de ciertas funciones político-sociales y conservaran —y acrecentaron— su posición privilegiada en cuanto propietarios de tierra y perceptores de ingresos procedentes de la producción agraria. El ejercicio de determinadas profesiones, no vedadas a los miembros del estamento, permitió a la capa media de la nobleza seguir controlando los altos puestos del ejército y de la armada, del estado eclesiástico y de la alta burocracia. La dedicación al comercio y a las manufacturas continuo siendo, salvo pequeñas modificaciones, impuestas en el ordenamiento legal, fieles a los cambios económicos precursores, coto de los miembros del estado general, mantenido por el rigor mitigado de la nobleza respecto a la posibilidad de hacer compatible la dedicación al comercio y a las manufacturas con la conservación de los privilegios del estamento reconocidos en el ordenamiento legal y en la tradición (…)

…los grupos privilegiados de la sociedad estamental procuraron reforzar su situación privilegiada en la economía, vinculando propiedades a las familias con privilegio para el mayorazgo, y mediante la amortización de las propiedades en manos de la Iglesia. Así quedaba asegurada y perpetuada la base económica. La nobleza constituía el estamento u orden privilegiado. Sus privilegios estaban asegurados por el ordenamiento legal vigente y por la tradición. Las exenciones de la ley común de que disfrutaban los nobles fueron recogidas y recapituladas,  a comienzos del siglo XIX, en la Novísima Recopilación. A las exenciones de la ley común hay que unir las facultades privilegiadas, también recogidas en la citada colección legislativa. Dichas exenciones y privilegios databan de siglos anteriores, y habían sido disfrutadas por los miembros del estado noble, incluso antes de consagrarlas el ordenamiento legal.”

El Antiguo Régimen: los Borbones
Gonzalo Anes
p. 44-45

Las Chinchillas
Francisco de Goya
1797-1799
"Caprichos", estampa 50

Estampa 50
Explicaciones manuscritas de Francisco de Goya:

P: El que no oye nada ni sabe nada, ni hace nada, pertenece a la numerosa familia de los Chinchillas (nota uno del autor) que nunca a servido de nada.

BN: Los necios preciados de nobles siempre están con su ejecutoria (nota dos del autor)  al pecho, reclinados desidiosamente, rezando como unos fanáticos el rosario, y bostezando. La ignorancia les alimenta groseramente, y tienen su entendimiento cerrado con candado.

A: Los necios preciados de nobles se entregan a la haraganería y superstición, y cierran con candados su entendimiento, mientras los alimenta groseramente la ignorancia.

CN: Los que  hacen alarde de su nobleza, pasan la vida en la haraganería: echan candados a su entendimiento, y son alimentados groseramente por la ignorancia.

Nota uno del autor: Chinchillas: protagonistas de la comedia “El dómine Lucas”, de José de Cañizares.

Nota dos del autor: Carta ejecutoria: “La de la hidalguía, que tiene el que es hidalgo, por haber litigado y salido con ella” (Academia Española, Diccionario de Autoridades, Madrid, 1726-1739).


Edith Helman descubrió la fuente de esta estampa en la comedia de Cañizares, “El dómine Lucas”,  donde se ridiculiza el orgullo nobiliario de dos representantes de una linajuda familia: don pedro Chinchilla y su sobrino don Lucas.

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